Leyendas reales
Andrea Stefanoni, La abuela civil española.
Es una mujer que está comiendo, trabaja en la librería y en el momento de comer aprovecha para relajarse. La llamó el hermano, él está a tres horas de Buenos Aires. Llamó para saludar y le dijo que se había caído su abuela Consuelo, cogió el primer taxi que vio, se fue de aquel bar porque su abuela al caerse empezó a echar sangre.
Sí me gusta porque la chica toma una gran preocupación por su abuela que su hermano le había llamado porque se cayó la abuela y se hizo sangre.
Agustín Fernández Paz, Muros.
Es una chica llamada Elena que ató una piedra con una cuerda y por el otro extremo de la cuerda ato una carta doblada que iría dirigida a Adrian, lo tiró por encima del muro de alambre y no pasaba nada, lo volvió a tirar una segunda vez y nada, no recibía ninguna señal. A la tercera vez se dio cuenta de que algo tiraba de la cuerda y la soltó. La piedra ahora la tiraron desde el muro hacia ella y venía con otra nota atada. Le decía a Adrián que estaba bien y que seguiría yendo al mismo lugar para seguir comunicándose.
Sí,me gusta, porque me parece bonito lo que hace el chico respondiendo las notas y volviendo al sitio todos los días aunque el muro los separara.
Judith Kerr, Cuando Hitler robó el conejo rosa.
Dento de poco estarían en Stuttgart. La madre buscó un taxi y hacía un temporal muy malo. Se quedarían en un hotel. Max, que es el hermano, y su madre fueron a comer. Anna es la hermana y se fue a dormir. Estaba muy cansada, se levantó a oscuras diciendo que pronto verían a su padre, lo que ocurre es que tienen que cruzar la frontera. Entraron en un tren, pero la madre le dijo que no dijeran ni pío cuando llegara el revisor a mirarle los pasaportes. El cielo se aclaraba y dejó de llover y había carteles de elecciones. Vieron un compartimento solo y allí se metieron. Llegó una mujer con una cesta; de ahí provenía un ruido. Max y su hermana quisieron mirar dentro pero Max estaba enfadado y siguió mirando por la ventana.
Sí, me gusta, porque se habla sobre una familia que viaja por todos los lugares para reencontrarse con el padre.
Es una mujer que está comiendo, trabaja en la librería y en el momento de comer aprovecha para relajarse. La llamó el hermano, él está a tres horas de Buenos Aires. Llamó para saludar y le dijo que se había caído su abuela Consuelo, cogió el primer taxi que vio, se fue de aquel bar porque su abuela al caerse empezó a echar sangre.
Sí me gusta porque la chica toma una gran preocupación por su abuela que su hermano le había llamado porque se cayó la abuela y se hizo sangre.
Agustín Fernández Paz, Muros.
Es una chica llamada Elena que ató una piedra con una cuerda y por el otro extremo de la cuerda ato una carta doblada que iría dirigida a Adrian, lo tiró por encima del muro de alambre y no pasaba nada, lo volvió a tirar una segunda vez y nada, no recibía ninguna señal. A la tercera vez se dio cuenta de que algo tiraba de la cuerda y la soltó. La piedra ahora la tiraron desde el muro hacia ella y venía con otra nota atada. Le decía a Adrián que estaba bien y que seguiría yendo al mismo lugar para seguir comunicándose.
Sí,me gusta, porque me parece bonito lo que hace el chico respondiendo las notas y volviendo al sitio todos los días aunque el muro los separara.
Judith Kerr, Cuando Hitler robó el conejo rosa.
Dento de poco estarían en Stuttgart. La madre buscó un taxi y hacía un temporal muy malo. Se quedarían en un hotel. Max, que es el hermano, y su madre fueron a comer. Anna es la hermana y se fue a dormir. Estaba muy cansada, se levantó a oscuras diciendo que pronto verían a su padre, lo que ocurre es que tienen que cruzar la frontera. Entraron en un tren, pero la madre le dijo que no dijeran ni pío cuando llegara el revisor a mirarle los pasaportes. El cielo se aclaraba y dejó de llover y había carteles de elecciones. Vieron un compartimento solo y allí se metieron. Llegó una mujer con una cesta; de ahí provenía un ruido. Max y su hermana quisieron mirar dentro pero Max estaba enfadado y siguió mirando por la ventana.
Sí, me gusta, porque se habla sobre una familia que viaja por todos los lugares para reencontrarse con el padre.
Hola, Marcos.
ResponderEliminarHay que resumir y comentar las tres lecturas. Te ha faltado una:
Judith Kerr, Cuando Hitler robó el conejo rosa.
Revisa la redacción del texto.
ResponderEliminarLa abuela de la primera lectura no vive en Buenos Aires, la capital de Argentina, sino en un pueblo "sin asfalto" a tres horas de viaje.
Corrige la ortografía de la segunda lectura:
Son (no "es") un niño y una niña
los (no "lo") habían separado.